Pesca y puerto/ Columna de opinión de Marcelo Pérez

El no cambio nos posterga a una crisis más profunda

    Llevamos ya nueve años que el Frente para la Victoria ocupa la cartera de pesca  (en nación y en la pcia.)
En la primer etapa de gestión, ésta se caracterizó por la rentabilidad positiva de las empresas como consecuencia de la  devaluación y por la  implementación de la  cuotificación, se pensó que se lograba con ésto aplicar la Ley Federal de Pesca y por consiguiente un proceso de ordenamiento del sector pesquero; y habría un férreo control estatal sobre la explotación del recurso.
    En ésta etapa de gobierno recae la responsabilidad de poder aplicar las medidas que acompañarían la cuotificación, control por cámaras, reducción drástica del descarte de merluza, clarificar la declaración de los Inspectores/Observadores (informes ) y cumplir a raja tabla con las recomendaciones biológicas. Se continúa con los problemas cotidianos; postergación del decreto de reducción de retenciones y posterior redacción incorrecta, lentitud en la Aduana para incorporar al Sistema María los nuevos aranceles, situación de permanente conflicto; fundamentalmente en el Pto. de Mar del Plata, que ha parado el desarrollo normal de sus actividades. Desde la Patagonia se sigue insistiendo con el déficit financiero empresario y todos los problemas sociales como consecuencia del cierre de plantas y pérdidas de puestos laborales.
    Hoy la mirada no está puesta en la sustentabilidad del recurso. Comprendemos la situación de la actividad pesquera, creemos que hoy tienen en sus manos para aplicar la pregonada responsabilidad social empresaria, es una oportunidad para negociar seriamente. Todos deben actuar responsablemente.         Debe modificarse el esquema tradicional y buscar alternativas y cambios que se deben producir de a poco;  apostar al cambio en la matriz pesquera y aplicar mayor valor agregado en tierra.
    Observamos con agrado que ésta semana que ha pasado se reunieron sectores relacionados con la actividad pesquera en la ciudad de Río Gallegos con funcionarios provinciales, donde pudieron acordar como puntos trascendentes guardias de puerto y embarque para marineros santacruceños, con radicación definitiva en Santa Cruz; a fin de dar cumplimiento a lo firmado por parte de las empresas pesqueras a mediados de mayo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires con las autoridades del Ministerio de la Producción y la Subsecretaría de Pesca provincial. Es importante resaltar el protagonismo y la consolidación que ha tomado el Consejo Municipal Pesquero y Portuario, para volver a ocupar el rol de ser partícipe constante y efectivo en todas aquellas políticas pesqueras y portuarias que aporten trabajo efectivo para todos aquellos que dependen del sector y ayudar al mantenimiento de la paz social en Puerto Deseado.
    Cuando la actividad pesquera funciona bien, el puerto, las plantas procesadoras trabajan bien y  muchas empresas y comercios se benefician con lo efectos multiplicadores que produce ésta actividad. Hoy ésta industria está ausente en Puero Deseado, se ha roto la cadena de pagos, van cayendo  los puestos de trabajo, el comercio sufre los embates de esta situación no deseada y que por el momento no se sabe a ciencia cierta de qué manera se podrá revertir. Se deben desarrollar procesos apropiados que significan mayor valor agregado y mayor nivel de empleo. Hoy encontramos comercios que merman sus ventas, otros cierran, y muchos entraron en una bicicleta financiera; como modo de poder estirar la situación, tratando de encontrar alguna salida que les permita recuperar índices económicos de años anteriores.
    El gobierno provincial es responsable de la situación en Santa Cruz y no debe mirar para otro lado. No escuchar, no ver los problemas,  castigar funcionarios y comunidades; solo lleva a agravar la situación y no a su solución.
    El verticalismo anula la riqueza del pensamiento diverso. La burocracia se asusta ante la duda y, por miedo a asumir la propia, se dedica a perseguir la ajena.
     Vivir en el pasado es perder el presente, pero ignorar el pasado es perder el futuro.

MARCELO FABIAN PEREZ
DNI: 13.400.456