El propietario de la empresa Santa Elena y presidente de CAPECA, Alfredo Pott, quien mantuvo reuniones durante la semana con diversos sectores de la comunidad, dijo ayer que las empresas pesqueras radicadas en Puerto Deseado no se retirarán, garantizando la continuidad de las fuentes de trabajo. «La actividad va a continuar, estamos empeñados en eso», aseveró, aclarando que «hemos estado parados dos meses, y eso ha sido un impacto muy fuerte».
«Además estamos en el momento de la parada biológica, el peor momento para una situación como esta», señaló, refiriéndose a las gestiones que se llevan a cabo con el Ministerio de Trabajo de la Nación para lograr apoyo para sostener los salarios de los trabajadores de las plantas. «Estamos haciendo un esfuerzo para que Deseado vuelva a funcionar lo antes posible», concluyó.
(EL ORDEN)
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