EL ORDEN DIGITAL

lunes, 12 de abril de 2010

Un artículo muy interesante sobre el matrimonio y la infidelidad

Patrimonio y Matrimonio

Le sorprenderá la asociación que establece la Biblia entre matrimonio y patrimonio.
El poder seductor del adulterio es impresionante, no sólo es un deseo que enceguece: “¿Y por qué hijo mío, andarás ciego con la mujer ajena, y abrazarás el seno de la extraña?”, sino una decisión que empobrece: “Para que no pierdas la riqueza de tus años en manos de gente extraña y cruel”. Interesante apreciación. Ser infiel es una decisión, es decir, voluntariamente uno se mete en la cama del otro; pero con la decisión vienen las consecuencias. Ese es el problema, no sólo sufrirá su matrimonio, sino el patrimonio que haya conseguido. Nada es gratis. Pagará con su trabajo. Se esforzará, pero el rédito no será suyo, señala el pasaje bíblico. ¿Dónde pues está el beneficio? ¿Un minuto de placer por una vida de desdichas?

Muchos no se percatan del poder maléfico que se libera con el adulterio. Es una especie de suicidio. No sólo mata la inocencia y los ideales, sino que mina la voluntad y convierte a la persona en prisionera de sus pasiones. Aunque mucho intente, nada vuelve atrás. Nada se olvida. El adulterio produce un efecto permanente, al decir de Orígenes: “Quedan las cicatrices”.

¿Puede prevenirse el adulterio?

Según Proverbios 5 el adulterio puede prevenirse:
-Aceptando el consejo divino: “...Escúchame: ¡no desprecies mis consejos! Apártate de esa persona y no te acerques a su casa”.
-Huyendo de toda seducción: “La persona infiel te engaña con palabras suaves y dulces”.*
-Visualizando las consecuencias: “Quién se enreda con el/ella, ¡va derecho a la tumba!”.

¿Cómo fortalecer la fidelidad matrimonial?
Según Proverbios 5 deberíamos:
-Saciarnos en el amor conyugal: “Si quieres disfrutar del amor, disfrútalo con tu esposa. ¡Guarda tu amor sólo para ella! ¡No se lo des a ninguna otra!”. Anímese a celebrar el amor conyugal
-Mantener la exclusividad sexual: “No compartas con nadie el gozo de tu matrimonio”.
-Disfrutar de los encuentros sexuales: “¡Que nunca te falten sus caricias! ¡Que siempre te envuelva con su amor!”.
-Cultivar el romanticismo: “¡Bendita sea tu esposa!, ¡la novia de tu juventud!”.

La fidelidad reditúa económicamente
Según una investigación alemana, los maridos fieles y sexualmente satisfechos rinden más en el trabajo que los solteros o los casados que tienen aventuras extramatrimoniales.
Citado por Guía de la sexualidad. Fascículo 10. Página 155. Ediciones Folio S.A. 2001. Barcelona. España.

Dres. José Luis & Silvia Cinalli

1 comentario:

Unknown dijo...

CHE PERO, EL HOMBRE NOMAS ES INFIEL???????