MENSAJE NAVIDEÑO DEL CURA PARROCO JOSE MARIA DOMENECH/ FUERTE CRITICA A LA PROMOCION AUTOMATICA Y A LA "PROMOCION ASISTIDA"

El cura párroco de Puerto Deseado, José María Domenech, tocó temas de actualidad, especialmente relacionados con el sistema educativo, en su mensaje navideño. Al referirse al compromiso de los cristianos dijo: "Si el Señor te trae la paz lo mínimo que te pide es “vívela hijo” porque si yo te traigo la paz y tú sigues con la guerra quiere decir que estas errado".

"Si yo te traigo el perdón y tú sigues revolcándote en tus errores quiere decir que no lo aceptas. El perdón significa que tú estas dispuesto a convertirte, así de simple", dijo, admitendo que "nadie es perfecto. Por supuesto que nadie es perfecto y el Señor no se lo pide a nadie, a nadie le pide que sea perfecto".

Recordó, sin embargo, que "en el capitulo 5, versículo 48, al final del capítulo dice “sean perfectos como el Padre celestial es perfecto” y esto significa: caminen hacia la perfección, busquen amar a Dios al estilo de Dios, busquen amar a los hombres al estilo de Dios".



Errores y educación

"Esa es la perfección que el Señor nos pide y no que no tengamos errores. Sería absurdo que lo pidiera, sería tan absurdo como que un profesor les pidiera a sus alumnos que no se equivoquen. No, lo que el profesor pide a los alumnos es aprendan. Él sabe muy bien que nos vamos a equivocar, él lo sabe muy bien. En el examen lo único que te pide que revisen es si has aprendido”, señaló.

En este contexto el salesiano irrumpió en los temas de la actualidad, sentenciando que "es estúpido el gobierno que dice que todos tienen que ser pasados de año... pero si no aprendió el año que viene no podrá seguir aprendiendo porque no sabe lo básico".

"Decir eso, que todo el mundo pasa de año es decir “señores, edifiquen el segundo piso aunque no este edificado el primero”. Ningún ingeniero dirá que eso es sensato, eso es una necedad. El maestro desea que el alumno aprenda y la tarea suya es despertar al alumno para que aprenda y si llega un momento en que tengo que decirle “hijito, no has aprendido, repite hasta que aprendas” pues eso lo hace cualquiera. Ningún entrenador dejará que su entrenado pase a la siguiente etapa si no superó la primera. Primero tiene que superar la primera y después pasar a la segunda y es verdad", desarrolló.



Fuera de toda lógica

Domenech opinó que "hay estados en los que se ha hecho la infinita necedad de decir: todo el mundo pasa de año porque no queremos quedar mal internacionalmente, eso es una imbecilidad. Perdonen la expresión y espero que nadie se sienta ofendido pero está absolutamente fuera de toda lógica". Continuando su crítica, agregó el párroco que "algunos dicen “no, no es que pasa de año así no más, no, pasa con seguimiento” Eso es una tontería. Lo están haciendo pasar de año. ¿Qué significa? El que no superó el año anterior tendrá que pasar al año siguiente afrontando las tareas del año siguiente y teniendo que afrontar las que no superó en el año anterior. ¿Y como va a hacer, si no tuvo energías para superar un año, para afrontar dos años al mismo tiempo? No hay sensatez. Y los que deberían rebelarse, si aman a sus hijos, son los padres de familia porque, claro, si se rebelan los profesores entonces es “los profesores no quieren trabajar”. Al que se esta perjudicando es al alumno, no es al profesor. También se le perjudica al profesor porque se le ponen cargas que no podrá llevar adelante adecuadamente o se le pone el doble de carga y el padre de familia dice: “supérelo” pero si el que no quiere estudiar es el alumno o el que no puede, no tiene las habilidades necesarias o los ambientes necesarios".



Navidad es el grito de Dios

Según el párroco deseadense "igualito pasa en la vida espiritual. Si tú no aceptas al Señor, si tú te cierras, tú estás destruyendo las posibilidades de futuro", añadiendo que "Dios viene a salvar, a llenar de vida, a liberar, a darnos paz, alegría y libertad pero necesita que lo aceptemos". "Belén era lo más pequeño. Dios no tiene problemas, aceptó que ahí naciera el salvador y Belén se hizo grande. Nazaret era lo mas despreciable de Israel, aceptó que allá se formara el hijo de Dios, gracias a una familia absolutamente abierta a Dios y Nazaret fue la patria de Jesús, la grande, la profunda. Israel, un pueblo pecador, como nosotros, Dios lo redimió, en Cristo Jesús, como nos quiere redimir a nosotros. Navidad es el gran grito de Dios que nos dice “Yo confío en ustedes, fíense de mi, yo puedo”, finalizó.