Dos años después de un brutal accidente siguen faltando centros de atención y comunicaciones en la ruta 281

Al cumplirse dos años del fuerte accidente que produjo severas contusiones y heridas a cuatro profesionales del Hospital Distrital de Puerto Deseado en la ruta nacional 281, recordaron que esto se produjo en el marco de un viaje que hicieron a la capital provincial para resolver cuestiones relativas al sistema de salud de la ciudad y a lograr la reincorporación de la pediatra Fabiana Faraldo, que había sido dispuesta por el gobernador Daniel Peralta. En este sentido el enfermero Julio Millaldeo volvió a calificar duramente al ex subsecretario de Salud, Sergio Vuckovic, al opinar  que “a Vuckovic lo echaron como un perro, como lo que fue, como lo que era y una reflexión que se me ocurrió en el momento de “no le voy a dedicar tiempo de mis recuerdos a una basura como esa” porque realmente una persona en la posición donde él estaba que podría haber hecho mucho por la salud porque no solamente estaba en juego el problema de los reclamos salariales, estaba el tema de que a la Dra. Farado se la había echado sin ningún motivo, nunca se le pagó lo que le debían".
Recordó que "la Dra. Faraldo viajó a Rio Gallegos por pedido de Daniel Peralta, el gobernador de la provincia, que se reuniera con Vuckovic, que tenía órdenes de solucionar el problema. Obviamente me preguntó si podíamos ir en el auto y obviamente le dije que sí, el resto éramos todos los que estábamos en reclamo.Obviamente llegamos allá, ella tuvo su reunión, participó Roberto Meyorín (psicólogo) también de esa reunión como para dar un poco de apoyo porque una de las costumbres que tenía Vuckovic era maltratar a la gente principalmente si eran mujeres".
Millaldeo señaló que "no solucionamos nada, nos volvimos. Como resultado yo perdí el auto, que lo estaba pagando, así que lo que reconoció el seguro prácticamente se fue todo para la Renault y la reflexión fue que hoy, dos años después, los traidores siguen traicionando y los luchadores seguimos luchando a lo mejor con los principios más fortalecidos, más convencidos de que lo que hicimos era lo que correspondía y lo que seguimos haciendo. Esa fue mi reflexión".

El estado del vehículo
Con respecto al accidente reflexionó que "inclusive a veces la realidad es más cruda que la foto", acotando que "cuando pude movilizarme fui a Tellier, donde estaba el auto, lo vi, y  viendo el auto era mucho más duro que la foto. Por ejemplo la butaca del conductor estaba retorcida. Yo creo que si hubiera ido a diez km más de velocidad hubiera salido eyectado con butaca y todo y la historia sería otra, totalmente diferente". "Nosotros hablamos mucho en su momento, tuvimos atención profesional de parte de psicología, realmente superamos la instancia y  cada cual tiene una propia naturaleza. Nosotros tenemos una naturaleza también y lo que no nos mata nos fortalece, por lo tanto estamos hoy prácticamente igual que ayer".
Por su parte el urólogo Javier Fernández dijo que "con respecto al accidente no me quedaron recuerdos del momento" y mencionó que "en su momento cuando nosotros pedíamos la neonatología o la terapia me tocó vivirlo con mis hijos, prematuros extremos, de tener que estar en Caleta y que por suerte hayamos podido llegar a  Caleta. Después con el tema de la salud en general nos tocó vivir este accidente y me tocó a mí estar en Caleta en la terapia intensiva internado y uno después de una situación como esta creo que hace un click y se empieza a preocupar también desde ciertos aspectos que también están relacionados con la profesión médica".
"Cuando fui a Tellier y vi el auto en vivo y en directo no podía creer que yo hubiese estado ahí adentro, que mis compañeros hubiesen estado ahí conmigo por cómo quedó el auto. El comentario de todo el mundo en su momento cuando se subieron las fotos fue “bueno, en este vehículo fallecieron todos los ocupantes” por cómo estaba el auto y la realidad es que todos veníamos con el cinturón de seguridad puesto, y creo que eso fue lo que nos salvó la vida porque si no no estaríamos acá".

Uso del cinturón de seguridad
Fernández insistió en que "hay que hacer mucho hincapié en esto de la prevención, del cinturón de seguridad. Nosotros nos habíamos empezado a hablar entre nosotros y con algunos familiares de gente que ha fallecido en accidentes similares al nuestro como para empezar a organizar, hacer charlas de prevenciones, explicarle a la gente la importancia de ponerse el cinturón de seguridad y se produjo el accidente con los chicos en la ruta, cerca de Jaramillo", planteando que "acá hay una característica que en otros lugares del país no sucede, que son estas enormes rectas donde la gente termina cansada, lo monótono lo lleva por ahí a dormirse, las banquinas no son como en otros lugares donde uno acá pisa la banquina el auto prácticamente, sistemáticamente, se da vuelta y me parece que es algo importante tratar de enfocarlo desde este punto de vista"

Comunicaciones
Los datos del accidente refirieron nuevamente a la falta de comunicaciones en la ruta, por lo que el enfermero Millaldeo destacó que "en un accidente lo que le salva la vida a las personas a veces es el tiempo, más considerando si las cosas pasan en invierno", ejemplificando que "abrimos una salita de primeros auxilios o un puesto sanitario en Tellier en el cual no tenemos ni siquiera un teléfono para comunicarnos, no tenemos ambulancia, obviamente el médico va los jueves nada más. Partiendo en que en la urgencia o en la emergencia lo primero es la comunicación y hay un servicio de salud sin comunicación podemos inferir como estamos referente a hace dos años. Los teléfonos SOS no funcionan y siguen estando, para nosotros es una mentira para todo el mundo, cualquiera que pasa por la ruta cree que tiene comunicación".

La "hora de oro" del paciente
Teniendo en cuenta la accidentología que se produce y las grandes distancias, sugirió que " en el kilómetro 60 de la ruta 281, donde está la casita de piedra, es conveniente haya un puesto sanitario, achica mucho los tiempos, pero un puesto sanitario bien conformado. No basta con que a una casita le pongan revoque y una crucecita, hay que ponerle también el personal adecuado, enfermero, chofer, médicos. Tiene que haber medico". Admitió que "nosotros tenemos jurisdicción hasta el 60, pero en una ruta que no es transitada de acá a que alguien pasa, se entera, da la alerta de lo que sucedió, nosotros salimos con los vehículos que tenemos y llegamos al lugar, todo el tiempo que necesitaba el paciente para aprovecharlo para salvar su vida se le quitó, está jugando con tiempo en contra". "Se dice que hay una hora que se la denomina la hora de oro, que es desde el momento que sucedió el accidente hasta que el paciente está en el quirófano si es necesario; dicen que en ese tiempo son las mayores posibilidades que tiene el paciente. Nosotros ya salimos con una hora de retraso prácticamente porque desde que nos enteramos y llegamos al lugar y volvemos acá, hay mucho más de una hora de retraso".