En una extensa misiva que lleva casi un centenar de firmas, los trabajadores de Vieira le solicitan al gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, una audiencia con carácter de urgente para plantearle la delicada situación laboral en la que se encuentran, como así también ponerlo al tanto sobre “una serie de hechos desafortunados que se produjeron desde el momento mismo que se originó la expropiación hasta la fecha”, lo que no aún llegó a sus oídos, sostienen.
Si bien valoran el esfuerzo puesto por la Provincia, se remiten al pasado sindicalista del mandatario para solicitarle el cumplimiento de los derechos laborales que quedaron truncos tras la expropiación. “Hoy somos empleados de nadie”, recalcan en un pasaje de la carta. En tanto que al cierre de esta edición trascendió que la provincia le cedería la empresa y la totalidad de los barcos a un empresario de Caleta Olivia, quien estaría depositando en las próximas horas una suma cercana a los 20 millones pesos para materializar la expropiación y poner bajo la modalidad de relación de dependencia a todos los trabajadores, aunque esto no fue confirmado.
“Es nuestra intención obtener una audiencia personal con Ud., señor gobernador, para poder conversar y exponer temas que nos generan suma preocupación luego de una larga espera que ya lleva 9 meses”, dice la carta.
“Insistimos en que valoramos el esfuerzo puesto de su parte, pero determinados puntos que pasamos a detallar generan un alto grado de insatisfacción y nos permitimos adelantarnos para poder ampliar sobre estos y otros temas. Al día de la fecha no somos empleados de nadie, carecemos de derecho laboral alguno, llevamos 9 meses sin aportes (período post-expropiación), más otro tanto del período Vieira, además de carecer de obra social”.
“Vemos cómo han ingresado a la empresa personas (con funciones que desconocemos), cuando la gran mayoría de nosotros pasamos nuestra jornada laboral sin tener tarea alguna. Ninguno de los empleados de Vieira Argentina SA posee ART que cubra eventualidades que pudieran surgir”, expresa la misiva.
Además, los trabajadores sostienen que “percibimos sumas muy inferiores a las que nos corresponden por el CCT de nuestra actividad, la antigüedad y capacitación adquirida. Soportamos estoicamente presiones de todo tipo por parte de compañeros que parecen haber asumido que son los nuevos dueños de la empresa”.
LA OPINION AUSTRAL
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