Los NI - NI
Se necesita trabajar fuertemente para revertir el constante crecimiento del número de chicos que ni estudian ni trabajan en la provincia de Santa cruz y en nuestra ciudad. Son jóvenes de entre 15 y 25 años denominados «NI - NI «, porque ni estudian ni trabajan. Se trata fundamentalmente de hijos de personas de bajos recursos que les cuesta salir de ese ámbito y que tienen hijos que también sufrirán éstas consecuencias. Es una dura realidad que en las localidades de nuestra provincia y en el país se mantuvo al margen de todo tipo de crecimiento económico.
También están los « NI - NI « entre la clase media, son muchísimos menos y no corren tanto peligro como los chicos de menos recursos; que debido al bajo ingreso familiar, ni siquiera a veces los planes sociales les garantizan la permanencia en la escuela.
Lo expuesto anteriormente nos muestra una situación muy grave, que pone en dudas las permanentes manifestaciones de las autoridades políticas referidas a inclusión, aumento del empleo, bajar la pobreza y la indigencia.
Rescato como programa oficial la Asignación Universal por Hijo, no alcanza, no es suficiente; no se ve reflejado en una mejora de la pobreza estructural.
Para muchos de éstos adolescentes, la educación no representa una herramienta de progreso, les faltan guías y referentes que actúen como verdaderos ejemplos; el hogar a veces no los contiene y muchos padres tampoco están atentos a lo que sucede en la escuela.
Contamos con una economía informal muy importante, con un nivel altísimo de trabajo en negro, ingresos irregulares, muchos jóvenes no encuentran oportunidades, no ven un horizonte claro. La droga y en algunos casos el delito los encuentra a la vuelta de la esquina. El trabajo informal, sin continuidad y el abandono escolar son pilares principales de éste problema.
Nuestro país ausente de políticas nacionales que beneficien a la provincia de Santa Cruz ( donde influye su ubicación territorial marginal, más la teoría que dice: que el crecimiento de las provincias pasa exclusivamente en función de la distancia con la Capital Federal ) nos impide, en la actualidad estar en iguales condiciones en la grilla de partida de la alta competición comercial, dejándonos descolocados en la periferia Argentina por muchos años más.
Necesitamos de políticas globales permanentes, recuperar la cultura del esfuerzo, reconstruir el valor de las instituciones. Debemos reflexionar en un gran cambio, desde adentro hacia fuera, y comenzar a trabajar para que sea una realidad.
Yo si creo que es posible un CAMBIO que nos impulse a modificar conductas individuales y nos lleve a la unidad, para poder unir esfuerzos hacia un lugar común; una mejor y más justa convivencia comunitaria.
«Hay dos maneras de engañarse: creer en algo falso o no creer en la verdad»
(Soren Kierkegoard - Filósofo)
MARCELO FABIAN PEREZ
DNI 13.400.456
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