El periodista, quien se desempeñó durante hasta su jubilación como profesor de Historia, director de la Escuela de Comercio 17 de Agosto y supervisor de Educación, admite que el viernes 20, alrededor de las 15,30 manejaba su vehículo a alta velocidad, cuando cometió un error que casi le cuesta la vida al agacharse a recoger un envase de jugo que había caído al piso. Esa maniobra determinó que perdiera el control del auto.
El accidente se produjo sobre la ruta nacional número 3, pasando el Cruce Camarones, en la vecina provincia del Chubut. Luego del vuelco, y ni bien quedó quieto el auto se aproximó al lugar un camionero que, recuerda, "me daba instrucciones de cómo salir del vehículo. Salí solo".
"Posteriormente me hizo sentar a la vera de la ruta y luego llegó Héctor Juanto con su familia de Puerto Deseado, agrega de la Cruz, quien tiene claro que en ningújn momento perdió el conocimiento. "También me ayudaron dos señoras de la Cruz Roja y un médico que pasaba por el lugar. Al rato llegó la policía de Camarones y la ambulancia", relata.
El conductor recibió los primeros auxilios allí mismo y luego fue trasladado hasta la ciudad de Trelew. "En el Hospital me proporcionaron una atención espectacular. Quedé ocho horas en observación luego de los aproximadamente treinta puntos que recibí en la cabeza y varias radiografías, pero se comprobó que no hay fracturas".
Los facultativos determinaron la realización de al menos una ecografía en la jornada del lunes, y algunos estudios durante la semana a fin de establecer que no hubo otras secuelas y poder permitirle el regreso a Deseado. "Uno de los médicos que me atendió me dijo que por las características del vuelco y la velocidad era para no contarlo, pero gracias a Dios lo puedo contar", finalizó.
(foto archivo VIA PATAGONICA)
No hay comentarios:
Publicar un comentario