Un numeroso grupo de personas se manifestó ayer por las calles céntricas de Río Gallegos, en lo que significó el segundo “cacerolazo” contra el pago desdoblado impuesto por el Gobierno provincial respecto a los haberes de los empleados estatales.
De esta manera la Mesa de Unidad Sindical concretó ayer las medidas de fuerza dispuestas en este marco, las cuales contaron en gran medida con el apoyo de trabajadores independientes y vecinos en general, molestos por el marcado atraso en el cobro de sus haberes.
Ni el crudo frío ni el fuerte viento fueron impedimento para los manifestantes, que se concentraron desde las 18 horas en la tradicional esquina de Kirchner y San Martín, para marchar luego al Ministerio de Economía y de allí a la Casa de Gobierno.
Finalmente volvieron al lugar de concentración para leer el documento elaborado por la MUS, en el cual resumen todos los conflictos inherentes a la crisis económica provincial que afecta no sólo el pago de salarios, sino también al sistema de salud público, “aplicando un severo plan de ajuste sobre los trabajadores”, dijeron.
El móvil de LU 12 Radio Río Gallegos dialogó con el secretario general de ADOSAC, Pedro Cormack, quien se mostró muy conforme con la convocatoria y sostuvo que “el paro docente tuvo un alto acatamiento en todas las localidades y esto demuestra la bronca de la gente, porque hubo más gente que en el cacerolazo anterior, el reclamo ya trascendió lo del salario”.
Según los principales sindicalistas, el acatamiento de los estatales superó el 80% en toda la provincia, lo que fue ratificado por el paritario de ATE Jorge Lemos, quien en diálogo con este medio indicó que “en nuestro sector (hospitales) el acatamiento fue variable, entre un 85 y 90% de los 14 nosocomios, por lo que ratificamos en una nueva asamblea el paro por 24 horas más para mañana (por hoy)”. Según el gremialista, existe aún “un 30% de trabajadores que no ha cobrado sus haberes, lo peor es que no sabemos qué va a ocurrir, teniendo en cuenta que el mes próximo se junta con el aguinaldo y todavía nos deben la segunda cuota del SAC de 2011”.
LA OPINION AUSTRAL
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