EL ORDEN DIGITAL

viernes, 23 de octubre de 2009

El abogado de Paola Delgado reveló detalles del caso que impactó a Puerto Deseado

La joven de 24 años cumple arresto domiciliario tras el asesinato de Ramón Sondón
"Paola fue víctima de un abuso grave en su niñez", sostuvo el abogado Edgardo Pola

El abogado Edgardo Pola, defensor de la joven Paola Delgado, quien cumple arresto domiciliario a la espera del juicio por el homicidio de Ramón Sondón, dijo que "ella fue víctima,
en su niñez, de un abuso, lo que denunció después de prestar declaración indagatoria, y eso actuó como un disparador en su psiquis, lo que dio como resultado la muerte del señor Ramón Sondón".
"Luego de haber cometido el hecho, ella se encuentra con su madre, que la va a buscar al trabajo diciéndole lo que había cometido, y luego de haber vuelto en sí, se dirige a la casa del papá de su hijo para despedirse... todo esto en menos de una hora o de media y se entregó en la comisaría", relató.
Entrevistado por el informativo "Latitud 47" (Vía Patagónica), Pola consideró "muy importante" que se le haya concedido el arresto domiciliario, por cuanto "es una chica de veinticuatro años, madre de un chico de cinco años". "Esto fue planteado por la defensa en su oportunidad, no valorado cuando se planteó la excarcelación pero sí cuando se produjo el auto de procesamiento, en el cual el juez interpreta que hay mérito para otorgarle ese beneficio, a partir de la postura que ella tomó respecto del hecho en cuanto a brindar total colaboración, y lo que declaró en la indagatoria, que es el acto de defensa madre que tienen todos los imputados, todo lo que manifestó fue corroborado con prueba independiente, y eso le da mucha veracidad a lo que declaró", siguió explicando.
El letrado reveló que "lo que resta, y que es muy importante para la defensa, son las pruebas y pericias psicológicas y psiquiátricas, en cuanto a determinar la capacidad de culpabilidad que ella tenía en el momento, antes, durante y después del hecho que cometió".
En cuanto a la tarea realizada por la defensa, comentó que "fue muy ardua los primeros días, las primeras dos semanas, con audiencias testimoniales muy largas, que se prolongaron, en algunos casos, hasta las diez de la noche" y se mostró "muy satisfecho con la actitud que tomó el juzgado en consideración de las garantías constitucionales", destacando "la agilidad con que se desarrolló el proceso por parte del doctor Mario Albarrán, que es el secretario que interviene en la causa y el juez que la habilitó".
Edgardo Pola estimó que "es prematuro aventurar un resultado del juicio", aunque destacó que "hay elementos que nos hacen pensar que Paola Delgado no estaba en pleno uso de sus facultades en el momento del hecho, lo cual va a quedar limitado a las pruebas periciales y psiquiátricas". "La prueba psicológica ya se hizo, y para la psiquiátrica tiene que ser trasladada a Río Gallegos para que intervenga el gabinete que tiene el Tribunal", aclaró.
El abogado recordó que la joven "hoy está procesada por homicidio simple, que tiene una pena entre ocho y veinticinco años, y le podría caber un homicidio atenuado, si hay elementos que atenúan el dolo, es decir la probable intencionalidad de cometer el crimen", admitiendo que podría determinarse la inimputabilidad "si se puede demostrar que ella estaba pasando por un trastorno mental transitorio".

Reflexiones
"Hay que recordar también que hay una familia que perdió un padre y mi cliente está consternada y compungida por lo que sucedió", aseveró Pola, añadiendo que "está muy arrepentida y que lo que sucedió, sucedió por un montón de circunstancias que no tienen que ver directamente con la víctima, sino con historias de su propia vida y que llevan a este desenlace final".
En este orden de ideas, reflexionó que "cuando uno habla de abuso sexual, que es un delito aberrante, lleva como ingrediente el arruinar la vida de la persona abusada, sobre todo cuando son infantiles". "Ese arruinar la vida trae aparejadas estas consecuencias", sentenció, para remarcar que "es muy grave el abuso sexual y muy graves sus consecuencias".
"El menor abusado se siente culpable de la situación, no se siente víctima", planteó, insistiendo en que Paola sufrió un abuso muy grave, que llevó a este final, que no era el deseado por ella ni mucho menos".
Al referirse a la situación actual de la joven, manifestó que "ella está bien, quiere seguir adelante, quiere volver a estudiar, tiene intenciones de hacerse tratar" aunque lamentó que "el disparador para estos cambios haya sido esta situación que vivió".

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