Dora Baztán, madre de cuatro hijos, casada con Alberto Mariano López, falleció el pasado viernes, a la edad de sesenta y ocho años.
Quienes la trataron recuerdan su profunda fe cristiana, su actividad como catequista en la parroquia local. Fue una cercana colaboradora de Matilde López y Adriano Blanco en la capilla Don Bosco, y nos ha dejado el recuerdo de su prudencia, su buen criterio y su amabilidad.
Poco antes de partir el maestro Andrés Randisi de Puerto Deseado, le escuché decir a su hermana "Beby": "-Ahora que te quedás sola en Deseado, cuando necesites un consejo, una orientación, hablá con Dorita, ella es la persona que te va a poder ayudar". Quienes la conocieron, sabe que fue exactamente así. Es nuestro mejor homenaje.
Mario dos Santos Lopes
2 comentarios:
La Prudencia , ¡que virtud! Acompaño con todo mi afecto en este momento a la familia Lopez-Baztan.
Un abrazo
Marcia
Dice el Salmo: "El justo vivirá eternamente"....Dorita vive eternamente...El abrazo para Mariano, hijos y nietos...Andrés Randisi.
Publicar un comentario