Toman medidas preventivas para evitar contagio de bronquiolitis y tos convulsa

Dos nuevas pediatras en el Hospital de Puerto Deseado
 A pesar de las temperaturas, que comenzaron a elevarse sobre el fin de semana, llegando a una máxima insólita de veinte grados el primer sábado de agosto, se vienen registrado varios casos severos de bronquiolitis entre niños de Puerto Deseado, especialmente los de más corta edad. La tos convulsa o coqueluche, que actualmente tiene vacunación gratuita, también se ha presentado en los consultorios. Destacan la incorporación de dos nuevas profesionales en el Hospital Distrital.
 En diálogo con el programa radial DESEADO REVISTA, la pediatra María Pía Ghirardelli explicó que "como todos los años nosotros en esta época, en agosto, generalmente después del pico de la bronquiolitis en el norte del país un mes o dos meses después tenemos la incidencia en nuestra localidad de infecciones respiratorias a nivel de sobre todo bronqueolitis, síndrome coqueluche, infecciones respiratorias en general". "De las más graves son para los más pequeños sobre todo la bronquiolitis y el coqueluche, ya que la neumonía, gracias a Dios ahora con una nueva vacuna que esta implementada en forma gratuita para todos los niños, ha disminuido un poco pero la bronquiolitis sigue estando en pie".

 Enfermedad mundial
 Señaló que "la bronquiolitis es una infección viral que la llevamos de persona en persona. Viaja en el aire, viaja en las secreciones respiratorias, viaja en las manos contaminadas, viaja de forma muy rápida, se va propagando de persona en persona y los más pequeños, los menores de dos años, son los  más proclives a padecerla porque por ahí la mamá o el papá tiene un resfrío o un dolor de garganta o una tos pero no va a tener síntomas bronquiales; en cambio el pequeño,  menor de dos años y sobre todo en menores de 6 meses puede ser una infección respiratoria grave con necesidad de oxigeno, con broncoespasmos".
 Ante la consulta periodística dijo que este contagio "no es exclusivo de las zonas frías; es mundial". "En realidad es un problema mundial de todas las clases sociales. Obviamente los chiquitos que tienen mayor riesgos son los prematuros, los que tienen alguna cardiopatía, los menores de seis meses, los pacientitos con algún déficit de nutrición, los que no toman teta, los que van a guarderías son los que tienen más posibilidades de contagiarse o de pasarla peor", puntualizó.

 Limitar controles
 "Como el contagio es muy fácil es por eso que en consenso con la jefa de servicio de pediatría que es la Dra. Paredes y con la dirección del hospital decidimos aconsejar a la mamá de que traten de no lleven durante estos días a los chiquitos a controles de niño sano para no exponerlos al contagio". Como ejemplo citó que "en la sala de espera del hospital a veces se mezcla un niño sano con un niño enfermo y no tenemos mucha forma de limitar esa exposición o poner a la derecha los sanos y a la izquierda los enfermos. No se puede".
 "La recomendación es que si no es estrictamente necesario no lo lleve al control a niño sano porque corre el riesgo de que por ahí va sano y en la sala de espera otro que tose al lado lo pueda contagiar. Tratamos de que concurran si es muy necesario; si no que sólo lo lleven porque está enfermo. De modo que corren menos riesgos de enfermarse. Lo mismo respecto a las salidas cuando son los bebes muy chiquitos por ahí limitar los paseos, limitar las salidas nocturnas de modo que los niñitos no tomen frio, no estén expuestos al humo de cigarrillo o alguna reunión familiar donde haya mucha gente donde quizás están enfermos algunos y sin querer lo contagian", detalló

 Nuevas pediatras
 En el marco de la entrevista mencionó una noticia altamente positiva para la atención de la salud infantil en la ciudad portuaria al anunciar que "tenemos dos nuevas pediatras en la localidad". "Gracias a Dios hace dos semanas empezaron a trabajar la Dra. Gladys Cruz que viene de Jujuy y la Dra. Evangelina Fernández que viene de Córdoba", añadió.

 Tos convulsa
 Con respecto a la tos convulsa, remarcó que "con la vacunación sobre todo la de los primeros meses donde con 2 a 3 dosis de las vacunas habituales tenemos una muy buena cobertura contra el coqueluche que está circulando ahora también en la Argentina".
 Aclaró la pediatra Ghirardelli que "es muy difícil hacerla desaparecer porque es una enfermedad que la padecen los niños y la transmiten sobre todo los adultos que tienen vacunas desactualizadas". "Los adultos deberían vacunarse igual cada diez años, pero como son adultos y no tienen una exigencia en vacunación salvo a los que por algún motivo en el trabajo se lo piden entonces transmiten la enfermedad sin demasiados síntomas pero los pequeños que no tienen bien las vacunas colocadas pueden padecer la enfermedad en forma más grave", aclaró.