Presunto sabotaje en plantas pesqueras de Puerto Deseado

Hidrocarburos contaminaron el agua

Denuncian presunto sabotaje en plantas pesqueras

El gerente de la empresa Santa Elena, Oscar Zarza, recibió el pasado jueves 25 de noviembre un informe del personal de mantenimiento de la planta, en referencia al agua que ingresa a la planta desde el acueducto de Servicios Públicos Sociedad del Estado.

Se investiga la aparición de hidrocarburos en planta pesquera.
En la oportunidad advirtieron que aparecía, sobrenadando en el agua de la cisterna de ingreso, un material oleoso que podría ser un hidrocarburo.

A partir de este extraño suceso, pusieron en marcha el plan de contingencia que tienen establecido en este tipo de situaciones. «Procedimos inmediatamente a suspender la producción de kanikama y a aislar esa cisterna de ingreso para evitar que esa agua vaya a los tanques, y a dar aviso al SENASA, que es la autoridad sanitaria correspondiente», explicó Zarza en declaraciones a medios locales.

Aceite quemado

En la mañana del viernes 26, los responsables de la planta dieron aviso a la delegación local de Servicios Públicos, y reconocieron la sustancia contaminante como aceite mineral de automotor, o «aceite quemado», indicando la duda sobre el medio por el que podría haber llegado a ese lugar. Posteriormente tomaron una «muestra significativa» y frente a una serie de testigos -debido a la ausencia temporaria del escribano en la localidad- procedieron a llenar un tanque se se encuentra totalmente aislado del sistema y descubrieron el ingreso de esta sustancia.

«Servicios Püblicos concurrió con mucha rapidez ante nuestra solicitud, verificaron el ingreso del material oleoso, hicieron un recorrido de la línea y verificaron que en una válvula del acueducto que se encuentra en la esquina de la empresa Carsa. El paralelepípedo de hormigón donde está alojada la válvula estaba lleno de aceite usado y se encontraba alrededor un montón de basura, entre los que había filtros de motores», detalló el gerente.

Limpieza y nuevos análisis

Con respecto a la actuación de SENASA, Zarza manifestó que «hicieron una verificación de que realmente habíamos aislado en forma total la cisterna donde se había producido la contaminación, y luego coordinamos con ellos y con el resto de las empresas para hacer analizar estas muestras en un laboratorio que se encuentra en Comodoro Rivadavia».

«La limpieza de la cisterna nos llevó casi tres días de trabajo continuo, utilizando materiales aprobados por SENASA, y lo hicimos con jabón en polvo, que permite retirar estas grasas minerales», detalló, agregando que una vez hecha esta tarea, se procedió a enviar nuevas muestras para el análisis correspondiente en laboratorio.

«No podíamos seguir produciendo con agua de dudosa calidad, por lo que aislamos totalmente esa cisterna, asegurándonos de que nadie, ni por error, pudiera tomar agua de esa cisterna, luego hicimos un by pass y llenamos los otros tanques con camiones, para poder continuar la producción de kanikama, que se retomó el martes», destacó.

Responsabilidad de SPSE
Con respecto a las versiones sobre un posible sabotaje a las plantas pesqueras de la localidad, Oscar Zarza dijo: «Nosotros recibimos el agua a través de un sistema que está habilitado por Servicios Públicos, y lo que ocurra aguas arriba de ese acueducto nosotros no podemos saberlo», acotando que «SPSE ha dado participación a la policía para aclarar qué es lo que realmente ha sucedido».