EL ORDEN DIGITAL

martes, 25 de agosto de 2009

Siete semanas y media sin clases en un jardín de Puerto Deseado/ Padres presentan recurso de amparo judicial

Jardín de Infantes lleva 50 días sin clases
Un grupo de padres presenta recurso de amparo


El jardín de infantes número 56, inaugurado en el año 2006 durante la gestión de Sergio Acevedo, sigue transitando una difícil situación, que ha determinado la suspensión de clases durante las últimas tres semanas. Esto, sumado al receso de julio, totaliza siete semanas y un día sin actividad escolar. Algunos padres han mantenido reuniones con integrantes de la cooperadora escolar, buscando alternativas de solución. Funcionarios municipales y del IDUV trabajan para dar una respuesta.

Miguel Rodríguez, integrante de la cooperadora escolar del jardín 56, anticipó que se presentará ante la justicia de Puerto Deseado un recurso de amparo para lograr el restablecimiento de las clases, suspendidas por el deficiente funcionamiento del sistema de calefacción del edificio. "No tenemos respuestas, y hemos tomado esa determinación", señaló, planteando que "no queríamos llegar a esto, pero es gravísimo que doscientos cuarenta niños no tengan clases después de veintiún días del reinicio".
"Nos dijeron que han hecho todas las gestiones que corresponden, pero en la última reunión vino gente del IDUV y nos dijeron que ellos no sabían del tema", informó, criticando el hecho de que se estén cambiando los vidrios. "Primero hay que resolver el problema de la caldera, esa es la solución", subrayó.
Rodríguez cuestionó una presunta orden verbal emanada desde Educación, para que las clases se dicten en un salón de usos múltiples, con aproximadamente ciento veinte niños por turno. "Dicen que hay que tener prevención para la gripe A y quieren que todos los chicos se reúnan en el salón de hacer gimnasia... creo que eso es incoherente y vergonzoso", sostuvo.
En el contexto de la charla, se refirió a la participación del presidente del concejo deliberante, Raúl Mella y del secretario general del municipio, Oscar Rain. "Los concejales no saben qué hacer y no saben por qué están ahí", manifestó, que "el enviado que mandó el señor intendente no sabía ni por qué fue a la reunión... lo que hizo fue mentirnos, lo hizo muy bien", refiriéndose a Mella, quien se encontraba a cargo del ejecutivo municipal.

Réplicas
El titular del concejo deliberante, Raúl Mella, afirmó que "lo que se explicó en la reunión fue que había un convenio entre el municipio y el Consejo Provincial de Educación, por el que el municipio se hacía cargo de algunas tareas, y lo demás es responsabilidad del Consejo".
En este contexto recordó que funcionarios del IDUV se hicieron presentes en la ciudad. "El ingeniero Carlos García fue al jardín de infantes y explicó que iban a hacer una evaluación de todos los equipos, para determinar si había que cambiarlos o no", comentó el edil.
"Si esta persona no entendió o pensó que yo le iba a prometer hacer un jardín nuevo, se equivocó", dijo Mella, advirtiendo que "nos comprometimos a agotar todas las instancias, pero no podíamos asegurar que se va a concretar".
Mella reveló que en uno de los debates se propuso que se dictara clase temporariamente a los alumnos de las salas de cinco años, propuesta que fue rechazada por los padres. "Esa es una obra de Nación, y el que estaba en conocimiento era el Consejo Provincial de Educación, que se lo comunicó hace pocos días al IDUV, pero no es cierto que el municipio informó hace pocos días", aclaró el concejal.

Problemas antiguos
En declaraciones a Prensa Libre, el secretario de coordinación de la comuna, Oscar Rain, explicó que "los vidrios se cambian porque Infraestructura Escolar considera que la escuela debería haberse habilitado desde el comienzo con doble vidrio, porque está construida con planos del Norte y tiene mucha pérdida de calor".
"Nosotros no le escapamos al problema pero cada uno tiene que hacerse cargo de su responsabilidad", indicó Rain. "El IDUV no fiscalizó la obra y la municipalidad tampoco, porque era una obra del gobierno nacional", recordó, señalando que "esa caldera tiene inclusive una parte electrónica, y no cualquiera puede manejarla". "Desde que se inauguró nunca anduvo bien, por lo que Educación determinó que esta semana viaje a Puerto Deseado una persona que fabrica estas calderas en Buenos Aires... eso demuestra la seriedad del tema", reveló. "Se ha tomado la determinación de dar una solución, pero no sabemos cuánto tiempo va a demandar", finalizó el funcionario municipal.

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