VECINOS SIN GAS RECLAMAN QUE SE CUMPLA EN DESEADO UN SUBSIDIO NACIONAL: "TENEMOS ESTALACTITAS", DENUNCIAN

Matías Mazú visita Puerto Deseado
"Tenemos estalactitas": vecinos reclaman por la falta de gas natural

Extraoficialmente pudo saberse, en la tarde de ayer, que el ministro de Asuntos Sociales de Santa Cruz, Matías Mazú, visitaría Puerto Deseado para cumplir con distintas gestiones. Vecinos del barrio "Cañadón del Viento" que después de cuatro años siguen aguardando la instalación del gas natural y sufren los altos costos de garrafas y tubos, solicitaron una audiencia con el funcionario para exponer su problemática, agudizada en los últimos días a partir del descenso de las marcas térmicas a varios grados bajo cero.

Andrea Vera, representante de la junta vecinal de ese sector alejado del centro de la ciudad, hizo hincapié en "la necesidad de calefacción y la provisión de garrafas y tubos". "Por eso decidimos juntar firmas y presentar un petitorio", señaló.
Con respecto a las redes anunciadas por el municipio, mencionó que "la empresa Ramírez ya comenzó la obra en las manzanas 317 y 318, pero está estancada hace unos veinte días y no tenemos conocimiento del por qué". "Las manzanas 320 y 321 lamentablemente pasarán otro invierno más sin gas, lo que afecta a unas treinta familias", explicó.

Subsidio nacional no llega a Deseado
"Hemos seguido buscando información y enviando cartas como cualquier ciudadano, para conocer nuestros derechos, hasta que encontramos por Internet una sigla que dice FAM (Federación Argentina de Municipios), y descubrimos que se trabaja en conjunto y que muchas problemáticas se pueden resolver por medio de esta red", planteó, acotando que "yo lo desconocía, y supongo que las autoridades no".
"En esa búsqueda descubrimos el subsidio que puso en marcha la presidenta Cristina Fernández en el 2008, para subsidiar la problemática de la falta de gas en toda la República Argentina, con un costo de venta al consumidor final de dieciséis pesos para la garrafa de diez kilos, subsidiando Nación a los pequeños y medianos comerciantes que despachan los tubos de gas al consumidor final", detalló la dirigente vecinalista, para plantear su sorpresa en estos términos: "no sé que pasó en Santa Cruz o en Puerto Deseado, ya que nosotros pagamos la garrafa de diez kilos a cincuenta y cinco pesos hasta hace unos días, en que subió más todavía". "Hay una diferencia abismal, sin hablar de que el tubo de cuarenta y cinco kilos está a 175 pesos", puntualizó, para recordar que para calefaccionar "medianamente" una vivienda se consumen no menos de cuatro tubos mensuales. "Gastamos más de ochocientos pesos por mes, y pasando frío", añadió, aclarando que cuentan con un sólo vale de descuento mensual.

Discriminados
Andrea Vera insistió en que "estamos subsidiados desde el año 2008 pero se nos escapó la tortuga... esto nos hace sentir olvidados del resto del país o de la provincia".
En este contexto, la representante de la junta vecinal, comentó que desde la secretaría de Bienestar Social se está gestionando el subsidio para las viviendas de Cogestión Solidaria. "Me parece excelente, porque tienen mucha necesidad, pero a nosotros, que la venimos remando desde hace cuatro años, necesitamos que las autoridades se solidaricen con nosotros y tengan consideración con nosotros, que lo necesitamos y no hemos sido considerados para este subsidio", reclamó.
Con respecto a la reunión que tendrán con el titular de Asuntos Sociales, Matías Mazú, afirmó que "esperamos una buena respuesta y no quedar afuera, aunque no seamos del plan provincial Cogestión Solidaria". "Nos reunimos con los vecinos y contamos en qué parte de la casa se hacen estalactitas... en mi casa se hacen en la cocina", relató.

Peor todavía
Un agravante de la situación planteada es el hecho de que el único distribuidor de garrafas y tubos que opera en Puerto Deseado habría decidido no recibir más los tickets de descuento otorgados por el gobierno provincial. Esto obligaría a quienes utilizan estos elementos a proveerse en Tellier, a veinte kilómetros de la ciudad, donde deben abonar un plus de cien pesos por flete.