"Me siento feliz de haber sido testigo de este gran acontecimiento", declaró el ferroviario jubilado Pedro Urbano, agregando: "yo no tengo meritos personales para haber estado sentado allí pero estuve y fue una jornada cívica de mucha importancia y de gran respeto y una gran participación femenina que hasta me sorprendió, me alegró".
Firmas de la población
Manifestó lo valioso de las presentaciones efectuadas por vecinos de Puerto Deseado "después de que los arquitectos Bortolozzi y Jaime Álvarez con una responsabilidad profesional, así, sin ningún tapujo raro porque lamentablemente esto se mezcla políticamente en un solo licuado y todos somos argentinos y desconfiados pero esta fotografía me resulta importante". Destacó la exposición de Eva Guerrero, integrante del equipo de Pastoral Social de la Parroquia Nuestra Señora de la Guardia "para referirse a sus 5097 firmas que el cura párroco le presentó al gobernador y que ella ahora le hizo entrega de la misma copia al ingeniero Bertolozzi y le hizo firmar la constancia debajo de la firma de Daniel Peralta, el gobernador de Santa Cruz".
"En estos momentos la comunidad deseadense con esa representación de esas 5097 firmas está dándole el okey y diciéndole a esta gente que ha venido desde el Ministerio de Planificación Federal a decir “señores, sí, estamos de acuerdo, métanle manija, estamos de acuerdo, es nuestra decisión, nuestra necesidad” y vuelvo a decir que tengo una alegría especial en la participación de la gente joven y sobre todo de funcionarios municipales que me llamaron mucho la atención como Carina Zini, de la Dirección General de Planeamiento, el concejal Gustavo González, un joven dirigente que estaa allí presidiendo la mesa junto a autoridades provinciales y nacionales".
Desde la UCR
Mencionó también la participación de la dirigente radical y ex concejal Silvia Cittanti "por supuesto con su sentimiento lógico partidario y representando a su UCR, presentando sus antecedentes históricos de cuando el radicalismo hace un montonazo de años hizo este planteo del lago Buenos Aires pero con decisión dijo “aquí estoy presente y apoyo esta idea porque es lo inteligente, por eso digo que es una jornada de civismo que me enorgullece de ser deseadense y de haber sido testigo de este momento".
Urbano, que tiene ochenta y seis años, recordó que "la historia del agua con el cuello de botella ya desde la colonización de 1884 ha sido un problema para Puerto Deseado y por eso esto que está ocurriendo ahora, que yo no lo veré tal vez con seguridad, pero que va a ser la solución y el desarrollo que yo deseé siempre para esta Patagonia, que se transforme en pujante y no el rincón de la patria".
Un problema histórico
Rememoró el problema histórico que la población deseadense ha sufrido en cuanto al vital elemento al decir que "en un fuenton de esos de zinc me lavaba colectivamente cuando era niño aprovechando el agua del enjuague y primero la cabeza, después una jarra con agua tibiecita y “pibe estás bañado” y la fiesta eran los días sábados para los deseadenses que no aparecía ningún vecino por ningún lado porque el día del baño era sagrado pero nosotros".
Citando las palabras de los funcionarios de la Secretaría de Recursos Hídricos de la Nación, sostuvo finalmente que "estamos manejándonos mentalmente con la escasez de agua y entonces tal vez no estamos preparados mentalmente para lo que va a significar el potente desarrollo que va a tener todo el flanco norte de Santa Cruz con esta cantidad tremenda de agua".
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