En Puerto Deseado padres de niños con TGD promueven concientización sobre el autismo

 Durante esta semana se llevan a cabo en Puerto Deseado distintos actos para crear conciencia en la sociedad deseadense con respecto al autismo. Para el sábado 6 de abril se prevé brindar información en el ámbito de la Escuela Especial nro. 11 "Canto a la vida". En el marco de una entrevista periodística, una madre registró algunos avances en la atención profesional.
 María Magdalena Ordóñez, madre de un niño de siete años con diagnóstico de autismo, dijo por FM Desiré que "generalmente esta patología se detecta después del año y medio", aclarando que "no es que el chico nace y ya le detectan el autismo  sino que se detecta después del año y medio o dos años. Ahí empieza la lucha porque en mi caso particular me decían “un chico autista”. Para mí un chico autista era una “planta”, donde lo ponías quedaba y no es así".
 Recordó luego: "yo lo veía a mi hijo que corría, saltaba, abría y cerraba puertas, que esos son síntomas normales en el autista, que no mira, que no responde cuando lo llamamos por su nombre. Yo de lo que entendía que era el autismo al verlo a mi hijo decía que eso no era autismo pero uno empieza a estudiar, empieza a investigar, empieza a hablar con distintos profesionales que nos van guiando y nos vamos dando cuenta de que sí, que son síntomas típicos de un chico autista y que es un producto de un trastorno del desarrollo". "Es un bloqueo en la parte neuronal, frontal, donde el nene no se puede desarrollar como un chico normal", resumió.
 En base al conocimiento adquirido durante los últimos años, la madre de Valentín señaló que "esta patología no tiene cura, sí mejoría y todo depende del entorno, de la familia, de los terapeutas y de la dedicación que uno le dé a cada niño". Planteó también que "la pelea con las obras sociales es bastante dura. Si bien se están logrando pequeñas cositas todavía hay niños que no tienen la cobertura total de lo que son las obras sociales y de los tratamientos".

 Atención profesional
 Consultada sobre la atención que reciben los doce chicos diagnosticados con autismo en Puerto Deseado, respondiö: "diríamos que a “media máquina”. Nos faltan profesionales. Faltan profesionales que tengan ganas de trabajar con este tipo de patologías". "Nos ha ocurrido a nosotros particularmente que cuando recién empezamos con todo este camino, cuando Valentín tenía dos años, no contábamos con profesionales que tuvieran interés en saber que era el autismo o trabajar con ellos", relató.
 Valoró, sin embargo, que "a medida que esto fue siendo más conocido y que empezaron a nacer más chicos, a haber más casos de autismo, que en Puerto Deseado para la poca población que tiene hay muchos nenes, creo que hay alrededor de doce nenes confirmados, que es muchísimo, es muy alto el índice". Destacó que "a partir de ahí empezaron los profesionales a ocuparse un poquito más de lo que es el autismo, a conocer, a estudiar y hoy por hoy tenemos un abanico de profesionales que están trabajando con nuestros hijos".