Un candidato con humor
Antonio Calderón quiere ser intendente de Puerto Deseado
Intentó llegar a la intendencia en el 2007 pero, debido a errores en la presentación de las listas, quedó excluido. Muchos pensaron que esto lo alejaría de sus intenciones políticas pero Antonio Calderón, autodefinido como radical de la primera hora y quien se proclama amigo de numerosos dirigentes de su partido, entre ellos el candidato a gobernador Eduardo Costa, insiste con su postulación para el 2011.
Su lenguaje no exento de humor e ironías, su verborragia y su condición de albañil y constructor, lo han tornado en uno de los personajes más curiosos -no el único- de la política deseadense.
El jueves por la noche, Calderón volvió con sus humoradas al presentarse en una entrevista televisiva durante el informativo "Latitud 47" del cable local, con su loro "Pepe", que a pocos minutos del reportaje comenzó a picotearle las orejas. Cuando el pájaro quiso intervenir en el diálogo, su dueño lo evitó porque, según él, "dice muchas malas palabras".
Equipo
A pesar de las críticas y burlas por su particular estilo, el precandidato anunció que ya tiene designado a parte de su gabinete, entre ellos el arquitecto Julio Menecier. "Es de Cruz del Eje, Córdoba, pero vive en Río Gallegos, y es quien me hizo el relevamiento de todo lo que hay y lo que falta en el pueblo, porque estudoó en Madrid, estudió lo que es la urbanización", explicó.
Entre sus colaboradores actuales mencionó al ingeniero Martín Goycochea. "Con ellos hemos hecho todos los trabajos que se necesitan para salir adelante, porque acá no se trata de un hombre, y ya sabemos que el Partido Justicialista no es capaz", opinó, aunque aclaró de inmediato: "no tengo enemigos políticos ni personales, aunque tengo gente que me quiere y gente que me odia, como toda la vida".
Ambiciones provinciales
"La crítica es muy linda para uno, porque va aprendiendo, y algunos dicen cómo un trabajador va a llevar una ciudad adelante, pero en este momento le digo a cualquiera de Deseado que estoy capaz de gobernar la provincia también", arriesgó. "Estoy en condiciones de gobernar la provincia porque la conozco", finalizó Antonio Calderón, quien ha elegido, en los últimos meses no criticar ni confrontar con otros referentes de su partido, que se habían mostrado molesto por sus intervenciones poco convencionales.
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